COMO SEMBRAR AHUYAMA O CALABAZAS QUE TENGAN MUCHOS FRUTOS Y CONSEGUIR DINERO EXTRA
Como Y Cuando Plantar Calabazas En El Huerto – Consejos Y Trucos || La Huertina De Toni
¿Cuáles cultivos se pueden plantar en compañía de la calabaza?
La calabaza es una hortaliza versátil que se puede cultivar junto con otras plantas para aprovechar al máximo el espacio y fomentar un mayor rendimiento en el huerto. Algunas de las mejores compañeras de la calabaza son:
Maíz: El maíz proporciona sombra y ayuda a retener la humedad en el suelo, lo cual beneficia a la calabaza, ya que es una planta que prefiere suelos húmedos. Además, las ramas del maíz pueden servir de soporte natural para las ramas trepadoras de la calabaza.
Judías o frijoles: Las judías o frijoles son conocidos como “fijadores de nitrógeno”, lo que significa que tienen la capacidad de convertir el nitrógeno del aire en una forma utilizable por las plantas. Esto es beneficioso para la calabaza, ya que requiere altos niveles de nitrógeno para un crecimiento óptimo.
Girasol: El girasol puede funcionar como protección para la calabaza, ya que sus altas flores pueden ayudar a bloquear el viento y proporcionar sombra parcial. Además, los girasoles también atraen polinizadores beneficiosos para la calabaza.
Hierbas aromáticas: Muchas hierbas aromáticas como la menta, el cilantro o el eneldo pueden actuar como repelentes naturales de insectos que afectan a la calabaza, como los pulgones o las moscas blancas. Plantar estas hierbas cerca de la calabaza puede ayudar a evitar infestaciones de plagas.
Es importante tener en cuenta que aunque estas plantas se consideran buenas compañeras para la calabaza, es necesario planificar y cuidar adecuadamente el huerto para evitar competencia excesiva por nutrientes y espacio. Además, es recomendable rotar los cultivos cada año para prevenir enfermedades y agotamiento del suelo.
¿Cuáles son las combinaciones de cultivos adecuadas y las que deben evitarse?
Las combinaciones de cultivos adecuadas y las que deben evitarse son importantes para aumentar el rendimiento de nuestras hortalizas y prevenir la propagación de enfermedades y plagas. A continuación, se presentan algunas recomendaciones:
Combinaciones de cultivos adecuadas:
1. Asociación de cultivos: Algunas plantas tienen una interacción positiva entre sí, como el maíz y los frijoles. El maíz proporciona soporte para los tallos trepadores de los frijoles, mientras que los frijoles fijan nitrógeno en el suelo, beneficiando al maíz.
2. Rotación de cultivos: Cambiar las especies de hortalizas en una misma área cada temporada ayuda a evitar la acumulación de patógenos específicos y a mejorar la fertilidad del suelo.
3. Interplante o cultivo en banda: Puedes intercalar distintas hortalizas en una misma cama o cultivarlas en bandas paralelas. Por ejemplo, puedes plantar lechuga junto a zanahorias, ya que la lechuga crece rápidamente y se cosecha antes de que las zanahorias necesiten más espacio.
Combinaciones de cultivos que deben evitarse:
1. Plantas de la misma familia: Evita plantar hortalizas de la misma familia en la misma área durante varias temporadas seguidas. Por ejemplo, no es recomendable plantar tomates y pimientos en la misma cama porque comparten enfermedades comunes.
2. Cultivos competidores: Algunas hortalizas tienen raíces profundas y se extienden mucho, lo que puede competir por nutrientes y espacio. Evita plantar cultivos como calabazas y melones cerca de otros de crecimiento vertical.
3. Cultivos sucesivos: Evita plantar la misma hortaliza en la misma área sin permitir un descanso para el suelo. Esto puede agotar los nutrientes específicos y favorecer la aparición de enfermedades y plagas.
Recuerda siempre observar las necesidades específicas de tus cultivos y hacer ajustes según las condiciones de tu huerto o jardín. Además, es recomendable consultar guías de asociaciones y rotaciones de cultivos para obtener mejores resultados.
¿Cuáles hortalizas no deben ser plantadas juntas?
En el mundo de la horticultura, existen algunas combinaciones de hortalizas que no se recomienda plantar juntas debido a diversas razones. A continuación, mencionaré algunas de ellas:
1. **Tomate y Patata**: Estas dos hortalizas pertenecen a la misma familia, la Solanaceae, por lo que son susceptibles a enfermedades y plagas similares. Al plantarlas juntas, aumenta el riesgo de transmisión de enfermedades y disminuye la salud de ambas plantas.
2. **Cebolla y Leguminosas**: Las cebollas tienen un crecimiento más lento que las leguminosas como los guisantes o las habas. Al plantarlas juntas, las cebollas pueden verse sombreadas por las leguminosas, lo que afecta su desarrollo y rendimiento.
3. **Lechuga y Rábano**: La lechuga y el rábano son plantas de crecimiento rápido y requieren una buena cantidad de espacio para expandirse. Si se plantan juntas, pueden competir por nutrientes y espacio, lo que resulta en un crecimiento limitado y bajo rendimiento de ambas hortalizas.
4. **Zanahoria y Apio**: El apio tiene raíces más superficiales y un crecimiento más rápido que las zanahorias. Si se plantan juntas, el apio puede sombrear las zanahorias, lo que afecta su desarrollo adecuado y la formación de las raíces.
Recuerda que estas son solo algunas combinaciones que se deben evitar, pero existen muchas otras consideraciones a tener en cuenta al diseñar tu huerto. Es importante investigar cada hortaliza individualmente y considerar sus requerimientos de luz, nutrientes y espacio para obtener una cosecha saludable y abundante.
¿Cuáles cultivos no son recomendables para acompañar a los calabacines?
Los **tomates** no son recomendables para acompañar a los calabacines en el huerto de hortalizas. Esto se debe a que ambas plantas son susceptibles a sufrir enfermedades similares, como el mildiú velloso y la podredumbre de los frutos. Al plantarlos juntos, se crea un ambiente propicio para la propagación de estas enfermedades, lo que puede afectar gravemente la producción de ambos cultivos.
Además, los tomates y los calabacines tienen diferentes requerimientos de nutrientes y espacio de crecimiento. Los tomates suelen ser más altos y necesitan un mayor soporte, mientras que los calabacines tienden a extenderse en el suelo. Plantarlos juntos puede resultar en competencia por recursos como agua, nutrientes y luz solar, lo que puede afectar negativamente el desarrollo y rendimiento de ambas plantas.
Otro cultivo que se debe evitar en compañía de los calabacines es el **maíz**, ya que también requiere mucho espacio y puede competir por los recursos con los calabacines. Además, el maíz tiende a crear sombra, lo que puede afectar la cantidad de luz solar que reciben los calabacines.
En resumen, es mejor evitar plantar tomates y maíz junto a los calabacines en el huerto de hortalizas para prevenir enfermedades, competencia por recursos y asegurar un adecuado crecimiento y desarrollo de las plantas.