La papa es uno de los cultivos más extendidos del mundo. Su consumo puede destinarse a la nutrición humana fresca, alimentación del ganado y como materia prima para las industrias agroalimentarias para la elaboración de patatas fritas, copos de patata, patatas congeladas, etc.

Dada la considerable suma de países que se ocupan de su cultivo y la gran variedad de patatas que existen, su disponibilidad en los mercados está garantizada durante todo el año.

Las patatas son una aceptable fuente de energía, ricas en ácido fólico, vitamina C, vitamina B, hierro y potasio. Es arriesgado consumir patatas verdosas pues contienen un compuesto que en enormes cantidades puede resultar tóxico.

Las patatas pertenecen a los cultivos más populares del mundo. Su consumo puede destinarse a la nutrición humana fresca, alimentación del ganado y como materia prima para las industrias agroalimentarias para la elaboración de patatas fritas, copos de patata, patatas congeladas, etcétera.

Dada la cantidad considerable de países que se ocupan de su cultivo y la gran variedad de patatas que hay, su disponibilidad en los mercados está garantizada a lo largo de todo el año.

La patata tiene múltiples usos: se puede emplear para el consumo humano directo, para la nutrición del ganado, para numerosas industrias alimenticias como la producción de purés deshidratados, la elaboración de patatas fritas, cocidas, congeladas, etc. También se puede emplear para la industria del almidón alimenticio o para la industria de la destilería para la obtención de alcohol.

El nombre de papa a esta planta fue impuesto por los españoles debido a la similitud que guardaba con “batata”, nombre original con el que ciertos pueblos de las Antillas designaban las batatas que eran plantas encontradas en los primeros años de la conquista. de América.

La patata es un factor esencial en la dieta mediterránea, además de servir de alimento para muchas especies de animales familiares y que se requiere para la obtención de subproductos en varias industrias.

Es un cultivo muy riguroso tanto desde el criterio del suelo como de los fertilizantes, también requiere de una defensa activa en frente de la cantidad considerable de insectos que atacan a la planta y sus tubérculos.

La papa es un tubérculo redondo u ovalado con pequeñas raíces blancas llamadas ojos. que no son más que brotes de desarrollo. El tamaño cambia bastante según la pluralidad y el color de la piel puede ser blanco, amarillo e inclusive morado.

El cultivo de patatas fue de colosal relevancia en Irlanda, en tanto que era una parte fundamental de su dieta. No obstante, esta colosal dependencia provocó una epidemia de inanición en tanto que la planta fue golpeada por la patología del “moho”, lo que provocó la emigración de una gran parte de su población a las tierras de Norteamérica que escapaban de esa calamidad. El cultivo de la patata pertence a los más extendidos en todos y cada uno de los continentes y debido al incremento de su consumo cada día cobra más grande importancia.

El área de cultivo de papa es muy amplia y es dependiente de las condiciones climáticas de cada sitio y no de las tierras agrícolas. El cultivo de la papa se ha extendido a todos los países del hemisferio norte y sur, con excepción de los países tropicales. Al ser de zonas muy altas y frías, la papa se puede cultivar desde la orilla del mar, hasta alturas de 1000 metros.

La papa se puede cosechar verde (verano en el hemisferio norte), antes que alcance su nivel máximo de materia seca (almidón). Esto se puede comer como la papa novedosa. que tiene una textura de cera haciéndolo apto para ensaladas. Las papas se clasifican en “plus tempranas”, “tempranas” y “tardías”, según lo indica el tiempo que tarda en madurar. La papa tardía, recolectada en otoño, se guarda en ambientes controlados y está disponible para su comercialización hasta? ¿Plus temprano? Hace aparición nuevamente.

Por tanto, según el Fresh Genera Desk Book de 2001, la disponibilidad de patatas en el mercado inglés está asegurada durante todo el año. Países como Bélgica, Francia e Italia son proveedores de patatas durante todo el año. Otros, como España, suministran patatas desde finales de la primavera (en el hemisferio norte) hasta principios del verano.

La papa es de la familia de las solanáceas y su fruto es un órgano que medra bajo tierra, llamado tubérculo. Es una planta herbácea de cultivo anual, muy exigente en agua que se reproduce vegetativamente.

La papa, Solanum tuberosum L., es una especie herbácea, perenne por sus tubérculos pero comunmente cultivada como planta anual. Forma parte a la familia de las solanáceas conocida como patatera o papa. La papa es una baya verde y redondeada que se regresa amarilla cuando está madura.

Patatera, como se conoce generalmente a la planta de papa, tiene un sistema vascular aéreo y un sistema vascular subterráneo de la naturaleza. rizomático donde se producen los tubérculos. Sus raíces son muy ramificadas, sus tallos aéreos son erectos y sus hojas son compuestas.

En los tallos subterráneos hay protuberancias llamadas tubérculos que conocemos como patatas y que pueden tener algunas especies de escamas que no son más que brotes de crecimiento que se llaman “ojos”.

En toda la planta de la patata hay una substancia muy tóxica llamada solanina que puede mostrarse en los tubérculos si se dan a conocer a la luz solar directa.

La patata es una planta con unas condiciones de cultivo bastante rigurosos. Requiere humedad abundante y regular singularmente en el período de tuberización, sufre de temperaturas excesivas y es muy sensible a la sequía. Se congela a temperaturas inferiores a 2 ° C, aunque los brotes empiezan a 2 ° C y alcanzan un máximo de 20-25 ° C.

Es más adecuado para suelos arenosos que arcillosos.

La papa se puede multiplicar por semillas o esquejes, pero en la práctica la multiplicación es vegetativa, esto es, mediante tubérculos que generan yemas de las yemas o también llamadas “ojos”.